El 10 de mayo la Presidenta Cristina Fernández anunció que se detuvo a un presunto narcotraficante por figurar en el Proyecto X, diciendo que "Cuando van a constatar, porque está detenido quien lo conducía, estaba identificado en el Proyecto X, figuraba en dos circunstancias adentro de ese software"; Y agregó: “Quédense tranquilos, salvo que estén haciendo algo que no corresponda ahí sí, puede ser que estén en el Proyecto X”, con las más crudas palabras que nos recuerdan al “algo habrá hecho” con lo que se justificaba la represión, tortura y desaparición de personas en la última dictadura.
A estos dichos respondió Myriam Bregman, abogadadel PTS, de esta manera: “no hay que ser muy perspicaz para darse cuenta qué es lo que “no corresponde” para Cristina Kirchner en materia de protestas sociales, sus permanentes declaraciones contra las luchas confirman que son los luchadores quienes engrosan las listas de espiados e infiltrados por la Gendarmería Nacional y otras fuerzas como la Policía Federal. Esto ha sido confirmado por la Ministra Nilda Garré al avalar todas las Directivas de Gendarmería para hacer espionaje ilegal al sindicalismo de base y dirigentes de la izquierda. Este es un gobierno que criminaliza a quienes se oponen por izquierda a sus mandatos al servicio de los empresarios y los burócratas sindicales como Daer”.
Frente a las nefastas declaraciones de la
Presidenta, desde la Juventud del PTS decidimos presentar un proyecto de
resolución desde nuestro lugar en la minoría estudiantil en el Consejo
Directivo de la Facultad de Filosofía y Letras. El proyecto presentado allí por
la palabra de quien les escribe, proponía que el Consejo Directivo se
pronunciara por el claro repudio a estas prácticas
ilegales y al Proyecto X, que vemos como se mantiene en uso aún después de la denuncia
realizada por diferentes organizaciones políticas, sociales y de derechos
humanos (CEProDH, Correpi, Liga Argentina por los Derechos del Hombre,
Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, Partido de los Trabajadores
Socialistas, Comisión Interna de Kraft Terrabusi, Comisión Interna de Pepsico
Snacks, Rodolfo Pérez Esquivel y otras organizaciones de DDHH). El proyecto,
además, proponía el rechazo a la criminalización y judicialización de la
protesta social, de la cual el “Proyecto X” forma parte, exigir la eliminación
de este programa y el cese de las causas por estar basadas en pruebas ilegales,
y la entrega de los archivos a las organizaciones afectadas. Y planteaba, además,
la necesidad de repudiar las declaraciones de la Presidenta Cristina Fernández sobre
la presunción de que las víctimas de este espionaje ilegal (entre ellas Madres
de Plaza de Mayo como Elia Espen, o nietas recuperadas como María Victoria
Moyano de Artigas) “habrán hecho algo que no corresponda”.
Este es un hecho lamentable que no podemos dejar pasar. No podemos aceptar que el co-gobierno de la Facultad de Filosofía y Letras avale estas prácticas dignas de la dictadura. Todos los estudiantes tienen que conocer la verdadera cara del “progresismo” de Trinchero, que se muestra cuando se habla de los temas que les encantaría dejar debajo de la alfombra y que sin descaro alguno y cuando las papas queman se pronuncia en contra de denunciar estas prácticas ilegales que perpetúa la Gendarmería Nacional con el clarísimo aval de la Presidenta.
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